808

Me dormí fantaseando una fantasía febril. Imaginé mi vida y mi muerte mi renacimiento entre los brazos del viento mi sexo mi afecto, el amor vegetal la tiranía del sol en otoño la flexibilidad de mis brazos, mi corteza ruda. Cuando desperté, en el diario, el cura Valente escribía sobre el libro de Rafael Rubio como si no hubiese pasado nada entre 1960 y junio de 2019, como si la historia y mis sueños no tuvieran ningún peso, ninguna sustancia.