1 de octubre. 
La ficción es la siguiente: el alba es aquel momento en el que es posible ver las continuidades entre las cosas, continuidades que el sol –según nuestra concepción diferencial del ser, del sentido, del tiempo y el espacio– cancela. 
Las continuidades no desaparecen, son visibles para quien ve con los ojos del alba, quien todavía sueña o no despierta del todo, para quien ofrece la cara amable.